viernes, 16 de diciembre de 2011

Los Viajes del Viento (Ciro Guerra, 2009)



Es una interesante película, claramente tiene una estética minimalista, muy a lo Luz Silenciosa (2007) de Reygadas, de Gerry (2002) de Gus Van Sant, de El Cielo, la Tierra y la Lluvia (2008) del chileno Torres Leiva, o de mucho del cine argentino (del nuevo) todas estas tienen algo en común: la imagen por sobre el dialogo, y es por ello que se valora, además es poseedora de una fotografía tremenda como elemento independiente, que es esencial en este tipo de filmes. Ahora como pasa con Gerry y la del chileno, sufre problemas de guión, creo que la trama es deficiente, por lo cual hace que el espectador pierda interés y muchas veces se pierda en el motivo de la película, casi como que no existiera el drama, porque existe pero este es pobre: El devolver un acordeón a un hombre del cual no sabemos nada y tampoco se nos revela elemento alguno (salvo al final en el cual vemos su cadáver) es símbolo de una épica falsa o desguarnecida. Claro está que presumimos algo, pero aquella presunción es desilusión a la vez. Creo que su director pecó de exagerado al tratar de ocultar, de dar ambigüedad o llevar al paroxismo lo mínimo y cayó mal parado en uno de los lados del riesgo, más si se toma en cuenta que los actores son amateurs y  por momentos su destreza queda en duda.   
Por otra parte, toma descuidadamente asuntos documentales y reales (fuerza del pueblo colombiano y sus tradiciones, similar a Crónica de una muerte anunciada de García Márquez, de hecho al principio pensé que era algo de ese estilo) y por otros, toca temas casi experimentales, fantásticos (aquella mezcla siempre me ha agradado pero esta vez creo que se exagera en ocasiones malamente) o más bien netamente ficticios: Los tres tipos que presencian o arbitran las peleas de gallos, el duelo a muerte o las personas que trabajan en el desierto (Otra vez el Nobel colombiano, pero esta vez el de 100 años de Soledad). Esta última escena me sugiere más dudas, junto a otras, ya que por momentos me parece que tienen por objeto mostrar una localidad, un plano magníficamente realizado, más que darle peso dramático e incluso narrativo al guión.
Con todo se valora que exista un cine de tal estilo por Latinoamérica, que bien escasos estamos de genios.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Las 10 Estrategias de Manipulación Mediática (por Noam Chomsky)


1. La estrategia de la distracción.  El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener la Atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales (cita del texto ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
2. Crear problemas y después ofrecer soluciones. Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.
3. La estrategia de la gradualidadPara hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.
4. La estrategia de diferir. Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.
5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad. La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)”.
6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexiónHacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…
7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridadHacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridadPromover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…
9. Reforzar la autoculpabilidad. Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!
10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.